sábado, 17 de octubre de 2009

Mefistóteles

27 ojos inundan tu vientre,mientras yo observo tu mano,
son tan bonitas,es algo mio con las manos,es que son... tan chiquitas.
parece que dejo de llover,vuelven los pajaros.
habrá que cerrar bien todos los postigos que dan al patio,
ya sabes lo que dicen de ellos.
tan solo un plumin que entre
costaría segundos para que la peste colme el lugar.
pero no te preocupes,muestrame las manos.
pondré dos troncos mas en el fuego,
afuera hace frió y esta esa cosa.lo esta hasta en el zaguán.
en cambio aquí esta tu risa,tan pura y encantada.
pintas verde mis impulsos y siempre hay destellos de rojo.
canturreas alguito y todo se detiene.se pueden ver las partículas.
me invitas a sumarme a tu manifiesto,
firmo
y al darme cuenta ya estoy cantando con vos y danzando por la sala.
en un momento tus ojos se fijan en los mios.
carcomen mis sentidos,se apoderan de de mi ser,
el pecho empieza a temblar.los escalofríos se anuncian
y los ojos salen de sus órbitas,suben.
entonces las llamas crecen,
nos envuelven y es el principio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario